Todo ha iniciado con una cena casual con amigos corredores, alitas y cervezas casuales, donde les he presentado diferentes eventos maratonianos en los Estados Unidos. El calendario presentado en esa ocasión abarcaba desde Marzo de 2013 (Maratón de Los Angeles) y terminaba en Junio del 2013 (Maratón de San Diego).
Luego de revisar pros y contras, agendas de todos, que si en marzo no podemos porque nadie entrena en diciembre, que si en junio no porque es cierre de semestre, que si en San Francisco no porque está muy caro el vuelo y tantas razones y motivos distintos de cada uno nos hemos inclinado por el 5 de Mayo. El maratón elegido fue The OC Marathon en Newport Beach, CA.
Pasaron todavía algunas semanas y finalizando el 2012 con una promoción de la aerolínea de bajo costo compramos el vuelo definitivo a Los Angeles. Vuelo redondo, cambios ilimitados, salida el 30 de abril regreso el 5 de mayo.
Aún había vuelta atrás, pero ya habíamos dado un paso.
El entrenamiento constó de 20 semanas, obtenido de una página de internet, ya había iniciado en la semana del 10 de diciembre y todo parecía ir bien de momento.
Distancias que empezaron en 5Km, que incluían velocidad, fartlek y distancias largas los fines de semana.
10Km, 11Km, 13Km, 16Km y el domingo 20 de enero he corrido como parte del entrenamiento el Medio Maratón de Culiacán.
8Km, 24Km, 11Km y el domingo 17 de febrero he corrido el Medio Maratón de Guadalajara y unos cuantos más para llegar a los 29Km, hasta ese momento la distancia más larga del entrenamiento.
El frío seguía en la ciudad, los entrenamientos eran antes de las 0630 e incluían guantes y sudadera deportiva.
Terminaba febrero y los entrenamientos seguían, ya estábamos por la semana 11/20 y faltaban aún las distancias retadoras. Creo que fue por estas fechas o principios de marzo, aprovechando un ligero bajón del dólar donde finalmente decidimos inscribirnos. Ahora si que no había vuelta atrás, seguía habiendo pero no la íbamos a tomar.
Continuará...